Las Marías
María Alexandra y María Camila, unidas de sangre y por la misma pasión, comienzan su viaje hace cinco años por la feria más grande de diseño interior del mundo: Salone del Mobile en Milán, Italia. Buscando inspiración, recorren kilómetros de feria entre pabellones llenos de creatividad, tendencias y variedad de estilos, llegando a la conclusión que a su estudio de diseño interior le hacía falta una línea de hogar; pensando en todas aquellas personas que ya han comenzado el camino de remodelar el espacio, pero les faltan esas piezas claves en términos decorativos.
María Alexandra, realizó estudios en publicidad y luego en diseño interior. En los 90’s junto a su hermano montaron una firma de arquitectura y ella se encargaba de toda la parte de dirección y ejecución de los proyectos de arquitectura. Estando en los comités de obra se enamoró apasionadamente por los materiales; especialmente por el concreto. De ahí surge la idea de intervenir este material llevándolo al siguiente nivel. María Camila, acompañó siempre a su mamá en el estudio y mientras jugaba con maquetas desechadas cogió el gusto por el diseño de espacios. Estudió Administración de Empresas, pero su pasión por el diseño la llevó a realizar un master en diseño interior en Milán, Italia. Cuando regresó al país, hace 11 años, montó su firma de diseño interior y desde sus inicios siempre tuvo claro que el arte tendría un papel fundamental dentro de los espacios que diseñaría; por lo que tomó un curso en mercado del arte con la idea de representar artistas emergentes colombianos. Tuvo la fortuna de involucrarse en el apasionado mundo del arte, lo que le permitió fusionar este ambiente con la idea que tenía en su cabeza: crear una línea de objetos decorativos y de esta forma acercar el arte a sus clientes.
Es entonces, hace cinco años, cuando nace La María Livng: El arte imitando la vida. Una serie de piezas de arte cotidiano que exploran la flexibilidad del espacio y su interacción con el mismo, haciéndose coleccionables, admirables, pero sobretodo: visibles.
Objetos que dentro de la cotidianidad se convierten en obras cómodas y adapables a su destinarario; su vida en familia o soledad indulgente. Cada una, escultórica, vibrante y auténtica, invitan a vivir el arte con un sencillo componente imprescindible e impagable: el tiempo.
Cada una de las piezas, trascienden en cada creación con la intención de sacar del hipnotismo de la rutina en la que vivimos; invitando a disfrutar en lo cotidiano la vida misma.
Usando infinidad de colores, técnicas ancestrales y manuales, experimentando con los materiales que vienen inspirados del interiorismo y la construcción, encapsulan por completo un estilo de vida para ser disfrutado.
Para ellas, el concreto hace parte fundamental de su lenguaje artístico, siempre explorando sus propiedades y resistencias inherentes a este material con un evidente análisis espacial natural. Es así como dentro de su proceso, le dan a cada pieza una dimensión que se mueve entre los límites de la plasticidad escultórica y la disrupción de la formalidad pictórica.
Actualmente, son profesoras de Domestika en donde enseñan sobre técnicas decorativas en concreto; paralelamente diseñan espacios de interiorismo alrededor del mundo.
Dos mujeres dinámicas, envolventes y multidimensionales que quieren concluir con criterio de diseño, la labor del interiorista que le da vida y estilo a los espacios intervenidos, por medio de objetos contemporáneos, funcionales, artísticos y atemporales